Ilusiones juveniles corren libres al ritmo de un balón (III)
Rafael Rodríguez Vargas.- ¿Habría de encontrarlo? Aún funciona el futuro, y es precisamente cuando el balón lo pongo a rodar. Camino, cabizbajo, y volteo hacia atrás, sin amor: el camino desmoronándose entre el recuerdo vago de un partido también vago. Pienso: ahora sí se acabó. El balón se fue rodando, y mi suerte tal vez…