Viviana Herrera.-
Foto: Cortesía.-
Más de dos mil negocios se crean en Venezuela cada año; sin embargo, la mayoría no supera los tres años de existencia, según un estudio realizado por el Centro de Emprendedores del Instituto de Estudios Superiores en Administración, IESA.
Afirma Aramis Rodríguez, coordinador del centro de investigaciones, que esta tendencia se ha mantenido a lo largo de los últimos 10 años.
Un sondeo realizado entre el 2014 y el 2018 permitió conocer que los negocios que emprenden los jóvenes venezolanos son de corta duración ya que no tienen un plan a largo plazo, además obedecen a “la oferta y la demanda”, en su mayoría.
De acuerdo con este informe el venezolano trata de rebuscarse, según lo que indiquen las tendencias.
En la actualidad las redes sociales son el principal portal para vender productos, debido a su capacidad para llegarle a gran cantidad de personas y evitarse las responsabilidades de un local físico.
El branding es una forma de contacto directo con el consumidor y, así lo indican algunas experiencias constatadas.
Bienchic es una tienda que nació para acompañar, asesorar que ofrece diversas formas de pago. En poco tiempo ha logrado gran crecimiento, debido –fundamentalmente- al manejo de sus redes sociales, según aseguró la Mariem Meneses, su fundadora.
Meneses explicó que decidió abrir la pequeña tienda porque estaba cansada de ir a las grandes cadenas a comprar y que todas tuvieran lo mismo.
Cuando fue ganando clientes y el espacio se le quedó pequeño decidió comprar un local en Las Mercedes y posteriormente en un centro comercial capitalino.
Afirma que su éxito se debe a las redes sociales, ya que sin su cuenta de Instagram con más de 400 mil seguidores y un buen community manager no hubiese podido llegarle a tantas personas como lo hace hasta la fecha.
Según estudios, más de 77% de las personas prefiere comprar en tiendas que tengan página en Instagram y que además puedan preguntar precios online. Sin tener la molestia de tener que ir hasta la tienda para poder saber el precio.Â
Al conversar con varios emprendedores que crearon sus negocios hace más de 10 años se constató que después de un período tuvieron que emigrar a las redes sociales, porque el alcance es mucho mayor.
El dueño de la panadería Manhattan explicó que sus ventas se incrementaron hasta un 50% desde que comenzó a colocar sus productos en Instagram.
Restaurantes tradicionales de Caracas han sucumbido al manejo de las redes, al percatarse de la interacción que ofrecen entre el cliente y el local.
En definitiva, las redes sociales permiten ahorrar dinero, porque no existe local físico y se necesitan menos empleados, y generar una relación más directa con los clientes. Cada vez es más común la venta de productos por tiendas online.
*Viviana Herrera es profesora de la Universidad Monteávila