Amén, Francisco responde

La producción de Jordi Évole en Disney plus, Amén, Francisco responde, no deja a nadie indiferente. Así­ lo refleja la prensa de estos dí­as.

Francisco
El Papa Francisco aborda diversos temas con jóvenes que le plantean sus inquietudes. Foto: Cortesí­a

Carlos Villasmil.-

Para algunos, su actitud es ambigua  –como refiere Sergio del Molino, en el diario español El Paí­s-: Amén: Francisco te quiere, pero…  es un documental brillante por momentos, que deja que la hipocresí­a de Bergoglio se manifieste en sus propias palabras”.  Hace amagos -dice el autor- de cercaní­a con las periferias existenciales, pero no termina de implementar en la Iglesia los cambios que los diversos grupos defienden.

Para otros -como reflejan los usuarios de Decine21, ha debido ser más claro en la exposición de la doctrina de la Iglesia sobre los diferentes temas que se le planteaban. 

Muchos ven en esta iniciativa el celo del pastor de almas que se acerca a la oveja que lo necesita. También su preocupación por un sector de la Iglesia, de la que es cabeza, que parece mirarse a sí­ misma y se mantiene a distancia del dolor de la humanidad. 

Para los conocedores del lenguaje de los medios de comunicación, el Vaticano se muestra ingenuo al no darse cuenta de que era una “encerrona” a la cabeza de la Iglesia para exponerlo en un ambiente adverso a la fe:  todo parece estar montado para transmitir un mensaje,  por ejemplo,  la elección de los jóvenes que participaron, mayoritariamente con situaciones de vida difí­ciles y contrarias a la moral del evangelio (solo 1 de los diez participantes era católico); gestos como la entrega y aceptación del pañuelo verde pro abortista por el Papa; situaciones expresadas como lo natural, ordinario y frecuente en la mayorí­a de los jóvenes, cuando en realidad hay otras muchas periferias: pobreza, enfermedad, desempleo, falta de acceso a la educación, drogadicción.   

Como vemos, el tema es complejo. Viene a mi memoria un episodio de la vida de Jesús:  “y Jesús se fue al monte de los Olivos. Por la mañana Jesús volvió al templo, y todo el pueblo se le acercó; y Él se sentó y les enseñaba. Entonces los escribas y los fariseos le llevaron a una mujer que habí­a sido sorprendida cometiendo adulterio. La pusieron en medio, y le dijeron: «Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en el acto mismo de adulterio. En la ley, Moisés nos ordenó apedrear a mujeres como esta. ¿Y tú, qué dices?» Ellos decí­an esto para ponerle una trampa, y así­ poder acusarlo. Pero Jesús se inclinó y, con el dedo, escribí­a en el suelo. Como ellos insistí­an en sus preguntas, Él se enderezó y les dijo: «Aquel de ustedes que esté sin pecado, que le arroje la primera piedra.» Y Jesús volvió a inclinarse, y siguió escribiendo en el suelo. Ellos, al oí­r esto, se fueron retirando uno a uno, comenzando por los más viejos y siguiendo por los más jóvenes. Solo se quedó Jesús, y la mujer permanecí­a en medio. Entonces Jesús se enderezó y le dijo: «Y, mujer, ¿dónde están todos? ¿Ya nadie te condena?» Ella dijo: «Nadie, Señor.» Entonces Jesús le dijo: «Tampoco yo te condeno. Vete, y no peques más.»” (San Juan 8, 1-11)

Una situación dolorosa, real, preparada con malicia para poner a prueba a Jesús. El Maestro pone de manifiesto su misericordia sin cambiar su valoración de la naturaleza de los actos (vete y no peques más). Queda de manifiesto que el verdadero acercamiento a las personas, no es el juicio (nadie está exento de culpa) sino la misericordia.

¿Qué puedo decir de todo esto? Pienso que es un llamado fuerte del Papa a los creyentes:

A salir de la comodidad: nos pide ir a buscar a las personas, entablar un diálogo amable;

A hablar al mundo real: ponernos en contacto con situaciones reales, buscando a las personas allí­ donde están (existencialmente). Jesús acoge a las personas aun antes de la conversión.  Este es, en buena parte, el mundo en el que vivimos, al que nos tenemos que dirigir, sin conciencia moral: personas «sin culpas», justificadas.

A actuar en la evangelización de modo humilde: en la Iglesia también hay pecado, no podemos hablar a los demás desde una actitud autosuficiente. Reconocer los errores de quienes formamos parte de la Iglesia y dar a conocer lo que se hace para evitarlos: por ejemplo, actitud de la Iglesia ante la pederastia; abusos de poder en la Iglesia.

A no dejar de transmitir la verdad, en el modo adecuado, sobre lo que es bueno para el ser humano, con el lenguaje apropiado a cada persona, teniendo en cuenta sus vivencias.  A Jesús le importa el hombre: lo que lo daña y lo que lo hace crecer; ha dado su vida por él.   Así­ lo muestra el Papa, por ejemplo, al hablar sobre el aborto; la dignidad de la persona y los medios de comunicación; personas católicas feministas:  lo moralmente malo no permite el crecimiento humano.

Pienso que el Papa mostró valentí­a al asumir este reto. Que una participación en el conversatorio de otras realidades de vida, hubiera evitado mostrarla tan tendenciosa. También que, para acercarse a las periferias, para remover a los creyentes, no hací­a falta mostrar, como algo general, lo negativo puntual de la Iglesia o dejar de mostrar todo lo bueno que sí­ hay en la Iglesia. Que, en este estilo de encuentros, no es fácil acertar en todo.   

La producción Amén, Francisco responde fue estrenada el 5 de abril.

En conclusión, pienso que el mensaje transmitido fue:

A los católicos: sal en busca del que está perdido. Confí­a en las personas, en lo que te dicen, no defiendas tu posición, intenta dar la mano.  Cultiva un estilo evangelizador empático: muestra siempre el máximo respeto a las personas, no acuses, muestra la verdad sin imponerla, muéstrate abierto a oí­r las posturas ante la vida más divergentes a la tuya sin escandalizarte.  Si tu fe no ha sido probada hasta ahora, no dejará de ser zarandeada.

A los que no comparten la moralidad natural: ven, esta es tu casa. Te pido perdón si te maltraté.  Todos tenemos un í­ntimo deseo de bien, por eso es importante todo lo que nos indique el camino para alcanzarlo.

A todos: acogida: al migrante, al que piensa y vive distinto.

¿Hací­a falta una mayor claridad en los temas morales? No sabrí­a responder. Pienso que para quienes participaron directamente en el encuentro pudo ser el inicio de un camino hacia la luz.  Y tú, ¿qué piensas? Te paso un resumen del documental.  https://www.vaticannews.va/es/papa/news/2023-04/dialogo-abierto-sincero-inedito-documental-papa-francisco.html.

Y una entrevista con Jordi Évole. https://www.elperiodico.com/es/ocio-y-cultura/20230405/jordi-evole-marius-sanchez-papa-entrevista-disney-85608617

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Pluma