Gloria Suárez.-
La figura del coach, guarda relación principalmente con el ámbito empresarial, organizacional, deportivo, entre otros; sin embargo, con el devenir del tiempo, se ha utilizado en diversos espacios, como, por ejemplo, en el campo educativo, con el fin de implementar estrategias eficientes dentro del proceso enseñanza – aprendizaje que fortalezcan las potencialidades del estudiante y le ayuden a superar las dificultades para que alcance el éxito en su formación.
En este sentido, la educación amerita de un docente cuyo objetivo esté dirigido hacia el desempeño profesional en la búsqueda de las herramientas integrales que le garanticen el éxito de su praxis, la formación del desarrollo personal, del equipo de trabajo de la institución donde labora y de los estudiantes.
Desde esta visión se puede caracterizar al docente coach de la siguiente manera:
*Es un líder positivo consciente de su repercusión y corresponsabilidad en la transformación del estudiante, la familia, la comunidad, el contexto educativo.
*Practica y promueve la ética, las virtudes personales, grupales, sociales, deja huellas y raíces positivas que contribuyen en la construcción de un mundo mejor a través del servicio y el ejemplo.
*Conduce al estudiante a plantearse un proyecto de vida con aspiraciones a corto, mediano y largo plazo.
*Lo encauza a conocer sus fortalezas, debilidades, potencialidades, oportunidades y aplicar acciones de cambio.
*Suscita la reflexión sobre la importancia de lo que se aprende, cómo se aprende y para qué se aprende.
*Brinda al estudiante herramientas integrales y promueve la toma de decisiones acertadas, mediante la creación de un ambiente de enseñanza – aprendizaje donde éste se enfrenta con resiliencia a situación problemas reales.
*Genera un clima democrático, autónomo y reflexivo, en el cual, involucra al estudiante en el diseño de la planificación y evaluación del proceso educativo.
*Invita a considerar con ética, la repercusión de su accionar en los diferentes ámbitos donde se desenvuelve.
*Organiza un espacio para atender, escuchar con interés, darle apoyo emocional y orientación al estudiante en todos los ámbitos.
*Aplica la autoridad y educación en positivo, fundamentado en el amor, la fe y confianza del crecimiento integral del estudiante.
*Un docente que siempre está en búsqueda de nuevos aprendizajes y un mejor desempeño en las competencias profesionales: cognitivas, sociales, éticas, emocionales, entre otros.
Por tanto, el docente coach es un mediador, cuya praxis está centrada en el estudiante como sujeto activo del proceso enseñanza – aprendizaje, facilita herramienta para fortalecer los valores individuales, grupales y sociales, mediante un clima de aula que promueve una visión de vida más ética, exitosa, virtuosa, útil, feliz, resiliente y enaltecedora de la dignidad humana. En resumen, el docente coach enseña a aprender para una vida plena.
*Gloria Suárez es profesora de la Universidad Monteávila