En el centro educativo se inmunizan a 100 personas diarias, en promedio
Carla Espinosa.-
Corina Esclasans recorre Los Palos Grandes en búsqueda de un centro de salud público que ofrezca la vacunación contra el Covid-19. Todo comenzó el pasado julio de 2021, cuando su decisión era colocarse la primera dosis de la vacuna Sinopharm y en ninguna zona del municipio Chacao, Miranda, había un ambulatorio para lograr su objetivo.
“Para el mes de agosto tuve que enviar un mensaje a un número telefónico que encontré, para que me asignaran una cita en el Liceo Gustavo Herrera, ya que desde el mes de junio no recibía convocatoria alguna para poder vacunarme y, además, ningún ambulatorio público del municipio tenía vacunas”, dijo Esclasans.
En una nota publicada en ese momento en el portal Crónica.Uno, se informó que todo el que haya sido convocado por un mensaje de texto, puede entrar al auditorio del aludido plantel, donde hay una puerta gris, con una bandera de Venezuela y un papel impreso que indica que allí funciona un punto de vacunación. Sin embargo, para Corina esto fue simplemente un juego de lotería, al que tuvo que arriesgarse.
Al cabo de un mes y 15 cuadras largas más allá de su casa, para llegar al Liceo Gustavo Herrera, consiguió vacunarse con la segunda dosis. Para ese entonces, solo entregaban 150 números, en un horario comprendido entre las 8 de la mañana y la una de la tarde.
Dos transversales más lejos de la residencia de la mujer, vive Henry Sosa, quien fue miembro del consejo comunal Norte de Los Palos Grandes.
Sostuvo que, a pesar de la coyuntura de no tener centros públicos de salud para vacunarse, la Alcaldía del municipio Chacao organizó algunas jornadas de vacunación, las cuales consideró insuficientes. «He tenido que recorrer todo Chacao a ver a dónde llego para vacunarme«, agregó.
Otras jornadas
En su cuenta de twitter, el concejal del Partido Socialista Unido de Venezuela, Jorge Chayeb, destacó las jornadas de vacunación que se han realizado en la Clínica El ívila y otros puntos del municipio.
En el barrio El Pedregal, una zona de Chacao caracterizada por abundantes casas, colores vivos y terrenos rocosos, se pudo conocer que la alcaldía inició en este primer trimestre del año, jornadas especiales de vacunación anticovid para niños y adultos.
Vecinos de la calle Farfán en el mencionado sitio dijeron que dichas jornadas se han mostrado planificadas, esporádicas y con respeto a las medidas de bioseguridad.
Por su parte, Nubia González, doctora de la salud pública, Â manifestó que la vacunación se está manejando bajo un sistema paralelo en los sectores públicos de salud del país, lo que explica la falta de vacunas en los ambulatorios de este municipio de tendencia opositora.
«El plan de vacunación es una actividad nacional llevada a cabo por el Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS) y en algunos casos en colaboración con la Cruz Roja, que apoyan en la logística de infraestructura. En los diferentes ambulatorios de Salud Chacao, no hay vacunaciones porque este plan depende del ministerio y ellos se enfocan en la cobertura de la Misión Barrio Adentro», añadió.
Sin afluencia en el Gustavo Herrera
Melly Parada, de 73 años de edad, relató que su paso por el Liceo Gustavo Herrera había sido ameno en las tres ocasiones en las que asistió, por lo cual calificó la experiencia como “sumamente organizada”.
Tras arribar por la avenida Francisco de Miranda y conseguirse con una caminería larga de plantas y un estadio de béisbol a su izquierda, subió las escaleras en dirección al auditorio y le tomó por sorpresa que no tenía a nadie por delante en la fila para colocarse el refuerzo de la vacuna rusa: Sputnik V.
Aun así, Betzaly Zamora, voluntaria de la vacunación del Liceo Gustavo Herrera, expresó que la concurrencia de personas ha disminuido. Proporcionó estadísticas que demuestran que para septiembre del año pasado se vacunaban 900 personas diarias y a la fecha, se llega a 130 personas.
Pese a que es el único punto de inmunización del municipio Chacao, los vacunados consideraron que las condiciones del plantel no están dadas para atender un proceso de vacunación de esta naturaleza.
Es de esta manera, como se vive la experiencia de inmunización de los residentes de Chacao.
A siete meses de la aplicación de la primera dosis, Corina Esclasans logró su cometido en el Gustavo Herrera, a 2,6 kilómetros de su casa.
El pasado 23 de marzo terminó de colocarse el último refuerzo de la vacuna Sinopharm y volvió a recorrer Los Palos Grandes en dirección norte con vista a El ívila, hasta arribar a la quinta transversal, donde está su morada.
*Carla Espinosa es estudiante de Comunicación Social de la Universidad Monteávila.
La estructura circular de este reportaje es la mayor fortaleza intelectual. Felicidades a la autora.