Eduardo Vidal Impagnatiello.-
Este sábado 3 de junio, en el Millenium Stadium de Cardiff (Gales), que cuenta con una capacidad de 74.500 espectadores, se jugará la final número 62 en la historia de la Champions League, encuentro que verá enfrentarse al Real Madrid y Juventus, equipos que ya chocaron en esta instancia: fue en 1998 cuando los merengues, con gol de Pedja Mijatovic, consiguieran su sexta orejona.
Juventus
La Vecchia Signora ha ganado en dos ocasiones la Champions, pero no saborea el triunfo desde 1996. Su última final jugada fue en el 2015, cuando cayeron derrotados ante el Barcelona 3-1.
El equipo italiano cuenta con la mejor defensa en Europa actualmente, y solo ha recibido tres goles en el torneo.
Ubicada en el grupo H, la Juventus pasó de primera en su serie, superando al Sevilla tras acumular un total de 14 puntos. No desplegaron un fútbol tan vistoso, pero se hicieron fuertes en casa.
En  octavos de final la Juve fue emparejada con el Porto, al cual derrotaron con global de 3-0. Una vez más la Vecchia Signora se defendió bien y fue efectiva a la hora de atacar.
En los cuartos de finales se enfrentaría Barcelona. Los italianos no partían como favoritos, pero de nuevo una defensa sólida, un equipo compacto, efectivo y dinámico le permitiría golear 3-0 en casa y después conformarse con un empate sin goles como visitante.
En la semifinal la Juventus se enfrentó con la sorpresa del torneo, el Mónaco. Nuevamente la solidez defensiva, y al efectividad rendirían frutos y, con un global de 4.1 sellaron su pasaporte a Cardiff. En esta serie se agrandó la figura de futbolistas como Dybala y Dani Alves.
Para esta final la Juventus también llega como campeona de su liga, título que suma al de la Copa Italia. La obtención de la Champions League llevaría a la Vecchia Signora a consumar el histórico triplete y así emular al Inter de Milán, que lo consiguió en el 2010.
Los dirigidos por Massimiliano Allegri se caracterizan por ser un colectivo, donde todos corren, defienden y atacan. Mezclando la veteranía con la juventud, tienen al que tal vez es el mejor arquero del mundo, Gianluigi Buffon, quien buscará su primera orejona. En la saga destaca la solidez de Leonardo Bonucci y la veteranía de Dani Alves; mientras que en la vanguardia brilla el talento de Dybala, quien le aporta magia al ataque, y el olfato goleador de Higuain.
La debilidad de la Juve puede ser la inexperiencia de ciertos jugadores, que tal vez no sepan manejar la presión del momento y eso les cueste el partido.
Real Madrid
El club merengue es el equipo que ha ganado más veces la Copa de Europa, contando con 11 trofeos en su vitrina. Ahora buscará la hazaña de ser el primer club desde 1990, cuando lo logró el Milan, que en dos temporadas consecutivas gana el torneo.
El año pasado el Real derrotó, en una agónica final disputada en el estadio Giuseppe Meazza de Milán, al Atlético de Madrid, para lo cual fue necesario ir hasta la instancia de penales.
La ruta de la Casa Blanca a la final se inició en septiembre del año pasado. Ubicado en el grupo F, los merengues fueron superados en la tabla por el Borussia Dortmund, pero aun así clasificarían en segundo lugar con un total de 12 puntos. En esta etapa el Madrid no desplegó su mejor futbol, pero paso cómodamente para en octavos de final medirse ante el Napoli.
A partir de esta ronda el cuadro merengue mejoró en su nivel futbolístico, con la efectividad ofensiva que los caracteriza pero todavía seguían teniendo algunas lagunas defensivas.
En los cuartos de final le tocaría enfrentarse nada más y nada menos que contra el Bayern de Múnich, entrenado por Carlo Ancelotti, quien había llevado a la gloria al Madrid al conducirlo a su décima Copa de Europa.
Esta serie estuvo llena de jugadas controversiales, pero el Real Madrid, con su eficacia a la hora de atacar y un Cristiano Ronaldo que en su mejor momento de la temporada marcó cinco goles en el cruce, dejó a los bávaros en el camino y continuó con su avance.
En la semifinal llegaría el derbi de Madrid contra el Atlético, redición de las finales disputadas en el 2014 y en el 2016. Aquí el Real desplegó su mejor juego y prácticamente sentenció la serie en el partido de ida disputado en el Santiago Bernabeu. A pesar que algunos pensaban que los colchoneros serían capaces de remontar. Una genialidad de Benzema dejó afuera a los dirigidos por Simeone. Las figuras de Isco y de Cristiano, quien marcó un hat-trick en el primer juego, fueron decisivas en esta ronda.
Para esta final el Madrid llega como campeón de la liga española, donde alcanzó su 33° corona. Ahora buscara el doblete, títulos que se unirían al Mundial de Clubes y a la Supecopa de Europa alcanzados esta temporada.
Los dirigidos por Zinedine Zidane han mostrado su solidez y eficacia en su cara ofensiva. Con la aparición de Isco, quien le otorgó un fútbol más fluido, y de Marcelo, quien está en el mejor nivel de su vida, junto con la magia de Kroos y Modric y la potencia goleadora de Cristiano, el Madrid tiene una de las mejores ofensivas del futbol actual.
El punto débil del conjunto merengue es la defensa. Al Madrid le llegan con cierta facilidad y deja muchos espacios a la hora de atacar, lo que puede ser aprovechado por su rival a la hora de un contrataque. El portero Keylor Navas los ha salvado en más de una ocasión.
Esta será una final muy linda y pareja. Solo quedara disfrutar y que gane el mejor.
* Eduardo Vidal Impagnatiello es estudiante de Comunicación Social de la Universidad Monteávila.