Sabrina Machado.-
A casa llena la Universidad Monteávila abrió sus puertas a tres nuevos proyectos educativos, que tienen como tarea fundamental empoderar a la ciudadana como autor activo en la resolución de conflictos y en la transformación de sus espacios de influencia.
En el marco de la celebración del Día internacional de la Paz, el auditorio de esta casa de estudio cobijó a decenas de personas interesadas en crecer y aprender, en función del bien común y el suyo propio.
Ante un público consciente de la necesidad de la promoción y formación de los conceptos básicos de tolerancia, convivencia, crecimiento y solidaridad, Luis Martínez, director del Centro de Estudios de Participación Ciudadanía de la UMA, destacó que la intención fundamental de los tres diplomados es brindar las herramientas necesarias a las organizaciones civiles, en pro de incidir positivamente en el írea Metropolitana de Caracas.
Los diplomados, que se encuentran enmarcados en el proyecto ReconciliACCIí“N, vinculan tres áreas vitales de la sociedad civil: juventud, mujeres y organizaciones, de la mano de la academia -que con los expertos- fortalecerá las guías de acción de los involucrados en los nuevos estudios.
“Hay experiencias vivas que demuestran que las cosas pueden cambiar”, señaló Martínez ante un auditorio comprometido con la transformación, la acción y la participación activa de la ciudadanía en pro del bienestar común.
Los espacios de estudios de la Universidad Monteávila están abiertos al selecto grupo que integra la primera cohorte de los diplomados en Gestión e Innovación Social de Organizaciones de la Sociedad Civil, Liderazgo y Gestión de la Cultura de la Paz y la No Violencia y Mujeres como Agentes de Cambio: Promotoras de la Cultura de Paz. Estos estudios tendrán una duración entre 144 y 188 horas académicas y está previsto que finalicen en el mes de febrero.
En la lección inaugural los representantes de las distintas organizaciones, que aprecian como un gran logro este espacio de formación que se abre a través de la UMA, se mostraron satisfechos y emocionados, interactuaron y brevemente compartieron historias enriquecedoras, donde se hace patente que en la unión está el crecimiento y la consolidación de sueños.
Roberto Patiño, quien fue el ponente de la Lección inagural, recalcó la importancia de la organización y del encuentro en común, al compartir su vivencia al frente de la organización Caracas Mi Convive. Su experiencia al frente de esta agrupación que busca reducir los niveles de violencia en sectores populares de la gran ciudad está consciente que la violencia se esparce como “una enfermedad contagiosa” que debe erradicarse a tiempo, con el trabajo de todos.
Entre los presentes en el evento se encontraba Aixa Armas, presidenta de la organización Mujer y Ciudadanía, quien recalcó la importancia del trabajo en pro de la cultura de paz en el país e hizo un llamado a “contribuir con el cambio que necesitamos en este país”.
Reconoció la importancia del proyecto ReconciliAcción, en el que se encuentra implicado la Universidad Monteávila, que busca integrar los sentimientos, la persona humana, en solidaridad  y condescendencia para salir de la situación que atraviesa el país. “Si no nos perdonamos, no nos reconciliamos, no hay salida, aquí hay un país que está dividido, tenemos que perdonarnos y reconciliarnos para salir adelante”.
“ReconciliACCIí“N es un proyecto muy ambicioso, de tres años, que trata de empoderar a las mujeres y a los jóvenes como agentes de cambios, constructores de paz y de cultura. En el caso de la mujer es ella quien lleva la paz a la casa y como todo hay que aprenderlo. Está previsto que se dicten seminarios, talleres en aras que sembrar la paz”, indicó.
A lo largo de cinco meses la universidad recibirá en sus aulas a un número importante de personas que desde sus comunidades ya han comenzado a trabajar por el prójimo y desde sus espacios adquirirán nuevas herramientas para profundizar su accionar, en pro de la paz y la convivencia en un país que atraviesa una importante crisis.
*Sabrina Machado es coordinador de Pluma