“Que cada palabra lleve lo que dice. Que sea como el temblor que la sostiene. Que se mantenga como un latido …”Rafael Cadenas
Javier Castro.-
Venezuela es y ha sido la cuna de grandes escritores y en particular, poetas. En el día internacional de la poesía, un país conmemora aquí a uno de los escritores vivos más importante que tiene, Rafael Cadenas, que casualmente es poeta. ¿Por qué el escritor más importante de Venezuela es un poeta?
Condecorado y reconocido internacionalmente por su obra poética, el escritor goza, entre sus logros más importantes del Premio Nacional de Literatura, Mención Poesía por su obra entera (1985); Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances (2009); Premio Internacional de Poesía Federico García Lorca (2015); Premio Reina Sofia de Poesía Iberoamericana (2018), ha sido el único venezolano en recibir este premio. Cadenas es nuestro candidato eterno al premio Cervantes (condecoración más importante de la literatura en español).
Nacido en Barquisimeto, estado Lara en 1930. El poeta y ensayista venezolano trabajó en la Universidad Central de Venezuela, afamado profesor de la escuela de Letras, único lugar donde tenían inscripción los poetas, quienes no viven de la poesía en Venezuela, no hay una profesionalización de este rubro.
Rafael Cadenas es un escritor que desconfía de las palabras, un poeta de aforismos, de poema breve, un flash que de pronto ilumina algo, él no cree que las palabras sean inocentes, teme a lo que ellas, con su uso incorrecto o incluso correcto, puedan hacer.
“El lenguaje del poder / ¿Qué hace / aquí colgada / de un fusil / la palabra / amor?”
Rafael Cadenas participó en el Partido Comunista de Venezuela, razón por la cual sería exiliado durante el gobierno de Pérez Jiménez hasta 1957. Es el escritor militante de los años 60, Cadenas explica como la filosofía comunista se acaba, expira.
Él es el poeta del fracaso, pero no del fracaso individual sino del fracaso colectivo que es el comunismo. Sus libros “Una Isla” y “Los Cuadernos del Destierro” son producto de su exilio. Rafael Cadenas vive en Venezuela y a sus 90 años de edad padece otro gobierno autoritario.
Fracaso
Cuanto he tomado por victoria es sólo humo. / Fracaso, lenguaje del fondo, pista de otro espacio más exigente, difícil de entreleer es tu letra. / Cuando ponías tu marca en mi frente, jamás pensé en el mensaje que traías, / más precioso que todos los triunfos. / Tu llameante rostro me ha perseguido y yo no supe que era para salvarme. / Por mi bien me has relegado a los rincones, me negaste fáciles éxitos, me has quitado salidas. / Era a mí a quien querías defender no otorgándome brillo. / De puro amor por mí has manejado el vacío que tantas noches me ha hecho hablar afiebrado a una ausente. / Por protegerme cediste el paso a otros, has hecho que una mujer prefiera a alguien más resuelto, / me desplazaste de oficios suicidas. / Tú siempre has venido al quite. / Sí, tu cuerpo, escupido, odioso, me ha recibido en mi más pura forma para entregarme / a la nitidez del desierto. / Por locura te maldije, te he maltratado, blasfemé contra ti. / Tú no existes. / Has sido inventado por la delirante soberbia. / ¡Cuánto te debo! / Me levantaste a un nuevo rango limpiándome con una esponja áspera, lanzándome a mi verdadero campo de / batalla, cediéndome las armas que el triunfo abandona. / Me has conducido de la mano a la única agua que me refleja. / Por ti yo no conozco la angustia de representar un papel, mantenerme a la fuerza en un escalón, / trepar con esfuerzos propios, reñir por jerarquías, inflarme hasta reventar. / Me has hecho humilde, silencioso y rebelde. / Yo no te canto por lo que eres, sino por lo que no me has dejado ser. Por no darme otra vida. / Por haberme ceñido. / Me has brindado sólo desnudez. / Cierto que me enseñaste con dureza ¡y tú mismo traías el cauterio!, pero también / me diste la alegría de no temerte. / Gracias por quitarme espesor a cambio de una letra gruesa. / Gracias a ti que me has privado de hinchazones. / Gracias por la riqueza a que me has obligado. / Gracias por construir con barro mi morada. / Gracias por apartarme. / Gracias.
Siempre, no importa el día, es una buena ocasión para celebrar a Rafael Cadenas, sobre todo porque se lo ha ganado. Luego de este poema del maestro Cadenas, se aclara más aquella interrogante inicial sobre el por qué nuestro mejor escritor es un poeta. En cualquier caso, siempre servirá para recordar que los que hoy parecen habernos vencido en realidad son los hace mucho tiempo fueron derrotados y derrotados por un poema.
*Javier Castro es pasante de Pluma