Dos gigantes se enfrentarán en una final Champions que promete muchos goles y un nivel futbolístico muy alto
Abel Graterol.-
Será París la ciudad que este sábado 28 de mayo paralizará el mundo, el Stade de France fue el recinto escogido por la UEFA para traer un duelo que enfrenta al Rey de Europa contra un Liverpool que cada vez se acerca más a amenazar su trono.
La historia de los enfrentamientos entre ambos equipos es muy pareja, dejando un ligero favoritismo al Real Madrid quien tiene 4 victorias frente a las tres que tiene el Liverpool, entre ambos hay un antecedente de un único empate.
Las temporadas de ambos clubes fueron exitosas en diferentes maneras, el Real Madrid se consagró campeón de la Liga Española sin mucha competencia, sin embargo, no fue así en la Copa Del Rey donde recibió una eliminación en los cuartos de final a manos del Athletic Club, alejándose de nuevo su tan ansiado triplete.
Pero la Liga no es la Champions, tal y como dice Ancelotti, reseñadas por la periodista Arancha Rodríguez. “En la Champions no puedes fallar, en la liga si pierdes un partido te puedes recuperar”.
La realidad es que el camino de los blancos a la final de la Champions ha sido de los más duros que han tenido, comenzando con una sorpresiva derrota de 2-1 ante el Sheriff Tiraspol, pero como es habitual, el Real Madrid fue sacando casta a lo largo del torneo.
Paris Saint Germain (2-3), Chelsea (4-5) y Manchester City (5-6), todos gigantes europeos que intentaron impedir en octavos, cuartos y semifinales que el club blanco llegara a la final, remontada tras remontada, luchando siempre hasta los minutos de descuento como contra el City, y con el Bernabéu como recinto que les daba fuerza.
Los merengues lograron derrotar a todos los grandes equipos que buscaban tumbarlos.
La plantilla actual del Real Madrid no es una plagada de estrellas, pero sí es un equipo sólido que comandado por Karin Benzema ha superado todas las adversidades, además, luego del rechazo de Mbappé al club merengue los jugadores se han llenado de orgullo y han sacado su casta de ser de los mejores equipos de la historia, como han expresado a través de redes sociales.
Por otro lado, está el Liverpool, los de Klopp han hecho una temporada de admirar, campeones de la copa de la liga inglesa, campeones de la FA Cup y peleando hasta la última jornada la Premier League contra el Manchester City, perdiendo el campeonato por tan sólo un punto de diferencia ante los citizens.
En relación a finales y duelos difíciles, esta temporada el Madrid tuvo remontadas, pero el Liverpool tuvo dos finales que llegaron hasta los penales, ambas contra el Chelsea y ambas ganadas, 6-5 y 11-10, respectivamente, demostrando el poderío ofensivo y el control en escenarios adversos que tiene el equipo inglés.
La suerte les sonrió a los ingleses, quienes tuvieron el camino más sencillo hacia la final. Se enfrentaron al Inter (1-2), al Benfica (4-6) y al Villarreal (5-2), vivieron momentos de empates agónicos, pero siempre demostraron lo peligroso de su contraataque y reaccionaron rápido ante la adversidad.
Los de Merseyside ahora buscarán ganar la Champions como sea, viéndose más capaces como nunca de hacerlo, porque el equipo que ha construido Klopp es de los más fuertes de Europa.
Será ahora momento de que Salah tenga su revancha, esa que declaró en semifinales donde dijo que quería enfrentarse de nuevo al Real Madrid tal y como pasó en 2018, buscando que ahora las cosas terminen diferente.
En aquella ocasión, el mundo entero fue testigo de lo que le costó al Liverpool la lesión de Salah ocasionada por Sergio Ramos al minuto 33 de partido y los graves errores de Karius en portería, esos que harían que los de Merseyside tuvieran que esperar un año más para levantar de nuevo la orejona.
Es trabajo ahora de Jurgen Klopp, reciente ganador del mejor director técnico de esta temporada en la Premier League, y de Carlo Ancelotti, único técnico ganador de las cinco grandes ligas europeas, de mover fichas y dar a un ganador de la mayor competencia continental.
Esta final de Champions presenta entonces a la jerarquía, ese rey de copas que busca que sean 14 las ganadas por el Real Madrid y, por otro lado, está el Liverpool, que poco a poco ha construido a un equipo excelente en todas las facetas y que busca seguir recortando terreno. Hoy sueña con la séptima copa.
Esta será una final especial, más allá de los equipos que se enfrenten, la UEFA aprovechó la oportunidad para hacer un balón especial que dice “Paz” en ucraniano/ruso e inglés, esto en referencia al conflicto bélico que involucra al noreste de Europa y parte de Asia, no es la primera vez que la UEFA envía un mensaje al respecto ya que la propia final de la competición, planificada para ser jugada en San Petersburgo tuvo que cambiarse y el patrocinio con el gigante de gas ruso Gazprom también se canceló.
Esta final busca llevar el cambio que recibieron las estrellas del balón, al mundo: la unión, esa que se aprecia al verlas unidas como si estuvieran abrazadas, el encuentro tendrá dos gigantes en la cancha y un solo mensaje fuera de ella, la paz.
*Abel Grateral es estudiante de la Universidad Montéavila
