Nabor Ruiz Martínez.-
íšltimamente se viene hablando de un nuevo término llamado Infoxicación, el cual es descrito como una intoxicación informativa que puede llegar a afectar anímica y hasta físicamente a las personas.
Y es que, ahora con el auge de los teléfonos inteligentes los usuarios pueden estar sometidos, voluntariamente o no, a un tropel de noticias que lo presionan o incitan a tomarlas en cuenta.
La infoxicación es normal dado el auge de las redes sociales y los medios electrónicos, y puede ser manejado normalmente por la mayoría de las personas.
Sin embargo, de acuerdo al nivel social, económico o cultural hay un tipo de noticias o información que en lugar de contribuir con la paz y tranquilidad, o servir de apoyo al conocimiento y distracción, lo que hace es alterar la psique de ciertas personas.
El tema de la salud, es otro que podría ocasionar desequilibrios emocionales, caso del covid-19,
Entre este tipo de información se podría mencionar todas las que se relacionen con la economía, sobre todo, bajo un ambiente de crisis aunado a la pandemia. El tema de la salud, es otro que podría ocasionar desequilibrios emocionales, caso del covid-19, o la misma situación hospitalaria del país, sumado a otros problemas sociales, como el hampa, o la falta de vivienda o servicios públicos. Todas estas son áreas que pueden presionar a las personas hacia estados de desesperanza o frustración.
En tal caso, lo mejor que puede hacer una persona al notar que enterarse de un tipo de noticias en particular le afecta, o causa tensión emocional o afectiva, es desconectarse por unos días y dedicar ese tiempo en algún tipo de actividad que le permita distraer su mente y relajar el estrés o la tensión.Â
Lo importante es detectar y reconocer el tipo de información que afecta a la persona. Ese es el primer paso para desinfoxicarse y buscar el equilibrio emocional necesario para funcionar normalmente.