Sabrina Machado.-
Fotografía: UMA.-
La campaña diseñada por Tomás Arias Peña y Jesús Molina Cisneros ganó el primer concurso Campaña por la paz, del Proyecto ReconciliACCIí“N, promovido por la Universidad Monteávila y las organizaciones civiles Oportunidad y Mujer y Ciudadanía. Por amor al arte obtuvo el primer lugar entre los cinco finalistas que presentaron sus propuestas como constructores de paz.
Arias y Molina son estudiantes del cuarto año de la Universidad Monteávila y del 11avo trimestre de la Universidad Metropolitana, respectivamente, jóvenes que se sintieron motivados a participar en este primer concurso, al considerar que a través de la cultura se puede lograr una conexión directa con la sociedad y ser el “vehículo” necesario para expresar la paz, según señalaron momentos después de conocer los resultados.
“Nuestra intención es la de conciliar en un mismo espacio distintas versiones de la misma realidad, que a través del arte sean capaces de sacar resultados positivos y productivos de la naturalidad del conflicto en sociedad. Esperemos que todas las personas inmersas en la campaña comprendan la experiencia como una nueva manera de concebir la cultura de paz, apoyándonos en nuestra intrínseca libertad de opinión y expresión”, aseguraron en la propuesta presentada al jurado calificador.
Los resultados se conocieron el día de ayer en un acto realizado en el auditorio de la Universidad Monteávila, donde se reunieron autoridades y miembros de la comunidad universitaria para respaldar este nuevo proyecto, que comenzará a ejecutarse a partir del mes de enero hasta junio, periodo en el que los dos jóvenes deberán desarrollar su campaña, de la mano de asesores que los acompañen en este proceso.
Asimismo fue reconocido el trabajo de los estudiantes Ana Teresa Morillo, Luciana Pérez Ramos, Verónica Ramak y Andrés Robles Riera, quienes figuraron como segundo finalistas con su campaña Alza tu voz y, el de Hilary Gil Pérez, Ambar De Nóbrega, María Teresa Blanco y Luna Delgado Tarazona con Dale Play a la paz, opción que conquistó el tercer lugar.
En el evento, el director de la escuela de Comunicación Social, Felipe González, mostró su complacencia por los jóvenes que se animaron y atrevieron a crear sus propuestas, en medio de un ambiente que llama al “desánimo y a la apatía”, producto de los distintos conflictos que se viven en la sociedad actual.
Por este motivo, los felicitó e instó a asumir que la paz no es un eslogan, sino una cultura que debe ser vivida y promovida en los entornos más cercanos, en los círculos más inmediatos, porque solo así “podremos recuperar el país”. Recordó que los principales llamados a este proceso son los jóvenes que “heredarán” esta sociedad y que deben apostar por su reconstrucción.
Los trabajos presentados ante el jurado calificador fueron consignados entre el 26 de noviembre y el 4 de diciembre. Cada estudiante universitario del írea Metropolitana de Caracas podía presentar su proyecto. El objetivo principal era crear una campaña que impulse la paz en una ciudad que vive situaciones dramáticas.
Los especialistas Mariana Bacalao, Luis Martínez, Isabel Quiroz, Alejandro Armas y Rodrigo Núñez evaluaron cada modelo de campaña en función de cinco puntos concretos: congruencia, consistencia, factibilidad, originalidad y complejidad.
Los miembros del jurado no conocieron las identidades de los jóvenes finalistas hasta el momento en el que se hizo público el nombre de los ganadores, en aras de blindar el proceso y darle la transparencia y honestidad que requiere este tipo de eventos.
Bacalao afirmó que fue una “tarea ardua”, porque cada propuesta tenía “muchos aspectos positivos”, por lo cual no fue fácil la selección de la opción ganadora. Asimismo, invitó a los presentes a no esperar que las propuestas de paz surjan solamente de las instituciones estructuradas, ya que cada quien es capaz de trabajar en pro de ella, en procura de cambiar las realidades actuales.
Por su parte, Rodrigo Núñez, profesor de la Universidad Monteávila y miembro del jurado calificador, invitó a los ganadores a crear una campaña sencilla, eficaz, emotiva, que considere al otro y que sea capaz de inspirar a las personas a ser “factores de cambio por la paz”.
Asimismo, se anunció que en el marco del Proyecto ReconciliACCIí“N el próximo año se realizará un nuevo concurso que invitará nuevamente a la comunidad universitaria de Caracas a seguir apostando por esta realidad tan necesaria.
*Sabrina Machado es coordinadora del periódico Pluma