Martí­nez: “Que la gente nos vea como una institución con las puertas abiertas”

Francisco Coronel Mejí­as.-

La participación ciudadana es un término que podrí­a definirse como el conjunto de mecanismos que puede emplear una comunidad para impulsar el desarrollo local y la democracia como estilo de vida. Su importancia radica en que, a través de ella, los ciudadanos pueden integrarse al quehacer nacional sin la necesidad de pertenecer a partidos polí­ticos o formar parte del escalafón administrativo.

En democracia la participación ciudadana no solo es un derecho, sino un deber, pues es la herramienta que los individuos poseen para dirigir su futuro y formar parte, junto a los gobernantes, de la toma de decisiones y el gobierno del paí­s. La Universidad Monteávila (UMA) reconoce el valor de esta herramienta y lo demuestra a través de la labor realizada por el Centro de Estudios para la Participación Ciudadana.

Luis Martí­nez, director del Centro de Estudios para la Participación Ciudadana, conversó con Pluma sobre el trabajo realizado por el organismo y el papel que este representa no solo para la universidad sino para la comunidad que la rodea.

_ ¿Cuál es el objetivo del Centro de Estudios para la Participación Ciudadana?

 _ Es un organismo que nace con la intención de promover la participación y la organización ciudadana en el marco de la democracia. Las actividades están dirigidas, primeramente, a la comunidad universitaria, y el próximo enfoque que es la comunidad del área metropolitana de Caracas. Nuestro trabajo está orientado a generar espacios de encuentro, de debate y de formación que promuevan el ejercicio de la ciudadaní­a, la corresponsabilidad y la gobernabilidad democrática.

El centro de estudios tiene 10 años funcionando. Su primer director fue Antonio Ecarri, luego Hilda Martí­nez y ahora mi persona. Nosotros de forma conjunta hemos promovido actividades que favorezcan la organización social y la participación de los jóvenes sobre temáticas importantes. Organizamos foros, talleres, encuentros, donde se discuten temas de interés para la universidad. En febrero, por ejemplo, haremos un evento enfocado en la libertad de expresión, cuyo ejercicio es un elemento clave de la democracia hoy en dí­a. También es clave para el Centro de Estudios dar una visión general, no parcializada, sobre lo que ocurre en el paí­s. Si alguno de los eventos a realizar está vinculado con la polí­tica, por decir algo, entonces invitamos a sectores tanto del chavismo como de oposición para que expongan sus puntos.

_ Cuando el Centro de Estudios trabaja con la comunidad externa a la universidad, ¿su enfoque es solo en el área metropolitana de Caracas?

_ Trabajamos con todos los municipios vinculados a esa zona porque son los actores más cercanos en términos de organización social. Sin embargo, nuestro trabajo se ha extendido a Guarenas y Guatire, que están más allá del área metropolitana de Caracas. También hemos hecho cosas de interés nacional, como diplomados a los cuales vienen personas del interior del paí­s, desde Lara, Carabobo, Zulia.

_ ¿Desde hace cuánto ejerce el cargo de director del organismo? ¿Quiénes integran el Centro de Estudios para la Participación Ciudadana?

_ Llevo como director unos 5 años. Realmente en la universidad ejerzo la función solo, pero nuestro trabajo va articulado con las facultades y con muchas ONG aliadas. Es un trabajo articulado para generar espacios, cooperando con otras organizaciones.

_ Lo que quiere decir que, en los 5 años que ha trabajado como director, ¿no ha tenido compañeros que estuvieran con usted dentro del Centro de Estudios para la Participación Ciudadana?

_ Otros han trabajado conmigo en el Centro de Estudios. Lo que pasa es que ha sido más que todo por proyectos. Dependiendo del proyecto que se esté haciendo, he tenido una variedad de colaboradores. Yo soy el único empleado fijo de planta, pero ha habido pasantes y profesores que trabajaron conmigo. Como miembros fijos, hemos llegado a ser máximo tres. Siempre varí­a entre una y tres personas. Actualmente solo estoy yo.

_ ¿Junto a qué organizaciones, fundaciones, trabaja el Centro de Estudios para la Participación Ciudadana?

_ Trabajamos con la Red Venezolana de Organizaciones para el Desarrollo Social, la organización Voces Vitales, el Centro Hispanoamericano para la Mujer FREYA, el Instituto Latinoamericano de Investigaciones Sociales, la Asociación Civil de Oportunidad, la organización Mujer y Ciudadaní­a, la Unión Vecinal para la Participación, la Fundación de Estudios Municipales.

_ ¿En qué favorece al Centro de Estudios para la Participación Ciudadana el tener alianzas con estas agrupaciones?

_ Nos articula con la sociedad. No solo es lo que hacemos, sino que generamos conocimiento desde la universidad para esas organizaciones, convirtiéndonos en un referente para la comunidad. Generamos formación académica, estructuras académicas para cursos de formación. También es una forma para que la universidad se integre. Por lo menos, que el liderazgo social de Petare, que es nuestro vecino inmediato del municipio Sucre, se venga a formar en la universidad. Creo que eso le da identidad a la UMA. Que seamos parte del desarrollo social de nuestro entorno y que la gente nos vea como una institución con las puertas abiertas para todos.

_ ¿Qué proyectos está llevando a cabo actualmente el Centro de Estudios para la Participación Ciudadana? ¿Cuáles son sus planes a futuro?

_ Estamos llevando adelante dos diplomados, los cuales queremos seguir fortaleciendo. Tenemos un curso de formación en constructores de paz. Estamos efectuando el ciclo de foros Venezuela 360, y ahora en febrero se expondrá el tema de la libertad de expresión, como comenté antes. Algo que no tenemos aún, pero que nos estamos planteando hacer, es un programa de formación de facilitadores. Formar a gente para que sea facilitadora en el tema de incidencia ciudadana. Así­ queremos dar una gota que ayudará a construir el mar que todos queremos, que es cambiar Venezuela en términos prósperos para todos. Y digo para todos sin importar la tendencia a la que una u otra persona pertenezca. El trabajo de los facilitadores serí­a el de generar espacios ciudadanos; facilitar, valga la redundancia, procesos ciudadanos.

_ ¿Qué logros ha obtenido este organismo hasta la fecha? ¿Qué objetivos impuestos ha podido plasmar y satisfacer?

_ Creo que es satisfactorio tener cuatro cortes en el Diplomado de Liderazgo y Empoderamiento de la Mujer y tres cortes en el Programa de Formación de Gerentes de Organización y Desarrollo Social. En un paí­s donde las cosas no tienen continuidad, tiene mucho valor el poder decir que el Centro de Estudios lleva ya más de 10 años funcionando, con las adversidades económicas, académicas y humanas que el paí­s sufre. El habernos mantenido trabajando, poder decir que hemos realizado una cantidad de cursos y espacios de encuentro, que el Premio Mujer Analí­tica se de en la Universidad Monteávila, siendo este un galardón que se entrega anualmente en el mes de noviembre a mujeres destacadas de la vida pública, todo esto, para nosotros, es algo de sumo prestigio, y se constituyen como logros importantí­simos.

_ Si algún estudiante está interesado en lo que se hace en el Centro de Estudios para la Participación Ciudadana y quiere estar en alguna de las actividades que lleva a cabo, ¿puede comunicarse con usted?

_ Por supuesto. Estoy a la orden y las puertas del Centro de Estudios están abiertas para todo el que las necesite. Me pueden buscar aquí­ en la oficina, justo al lado de reproducción, en la sede. Yo estoy todos los jueves y viernes entre las 9 am y las 12 pm.

* Francisco Coronel Mejí­as es estudiante de Comunicación Social de la Universidad Monteávila.

* Rubén Sevilla Brand es estudiante de Comunicación Social de la Universidad Monteávila.