Según educadora, el factor desmotivación tiene una gran presencia en el proceso educativo a distancia
Katherine González-
A raíz de la pandemia impulsada por covid-19, los profesores se han visto en la obligación de continuar con el proceso de enseñanza y aprendizaje desde sus hogares. Este método es algo completamente nuevo tanto para alumnos como para educadores, pero hay que “plantearse nuevos retos”, para así lograr resultados positivos, aseguró Mariela Rodríguez, profesora de educación media general.
Mariela Rodríguez, directora de la Unidad Educativa Privada Instituto Educacional San Antonio, es además, profesora de sociales y castellano, cuenta con una experiencia de 25 años en la docencia, es licenciada en educación especial, orientadora y cuenta con un diplomado en “Proyecto Educativo Integral Comunitario”, P.E.I.C.
“Al principio tuve cierta resistencia al cambio porque me parecía que a mis estudiantes no les llegaría el aprendizaje que yo esperaba, tuve que plantearme diferentes retos para lograr mi objetivo”, comentó la profesora al hablar del gran cambio que tuvo que afrontar al enseñar y educar por medio de plataformas digitales.
-¿Cómo ha sido su experiencia en el proceso de enseñanza y aprendizaje por medio de la educación online?
El aprendizaje ha sido difícil, puesto que no estoy acostumbrada a dar clases online y he tenido que aprender a trabajar en ciertas plataformas. Tuve que investigar según las necesidades el grupo plataformas que fueran dinámicas y didácticas para ellos.
Al principio presenté cierta resistencia al cambio porque me parecía que a mis estudiantes no les llegaría el aprendizaje que yo esperaba, por lo cual me planteé diferentes retos para lograr mi objetivo.
-¿Cree que los alumnos han obtenido un aprendizaje significativo?
En mi caso específico creo que sí lo he logrado, puesto que me dediqué a crear guías pedagógicas y clases en vivo por grupos para obtener mayor atención, entendimiento y mejores resultados.
He notado un poco más de entusiasmo por parte de mis alumnos debido a que a través de estas herramientas que les he planteado hay cierta simulación de acercamiento entre todos y realmente eso los motiva y ayuda a conseguir fuerzas de donde ellos mismos creen que no las hay.
-¿Cree usted que los padres orientan a sus hijos o les realizan las actividades escolares?
Sí los orientan pero, en muchos casos, les realizan las actividades. He notado en ciertos estudiantes, por lo menos en el caso de mi institución educativa, que en contenidos donde tenían dificultades, comenzaron a salir muy bien, por lo cual opté a cambiar la estrategia de mi materia. Se habló con los padres para que los formen, no para que los deformen realizándole las actividades.
-¿Cómo piensa usted que la motivación y desmotivación ha influido en los alumnos a raíz de esta nueva modalidad?
Realmente ha influido muchísimo, primero porque el alumno está en un encierro total que ha creado cierta ansiedad, apatía y desinterés, simplemente no tienen ganas de hacer nada. Es por eso que en las clases se intenta motivarlos, hablar un poco de la vida, el cómo se sienten e intentamos que ellos de alguna manera se desahoguen y sientan apoyo por parte de su institución.
He tenido casos de alumnos deprimidos, estudiantes que se sienten solos, que han querido abandonar y tirar la toalla, todo esto se debe a la falta de recreación, quieren salir, quieren divertirse y eso los mantiene en un pesimismo constante.
-¿Cuántos son los objetivos máximos que le da tiempo de evaluar?
En este momento sólo he podido evaluar cuatro contenidos significativos y entre ellos he incluido objetivos pequeños de los aspectos básicos. Me he dado cuenta de que en ciertos contenidos he tenido que ir un poco más despacio puesto que realmente les cuesta un poco.
En algunas clases y temas avanzamos más rápido, lo cual me permite dar mayor cantidad de contenido en menos tiempo a mis estudiantes, pero en otros contenidos requiere un poco más de paciencia.
-¿Qué es lo más difícil que le ha tocado llevar en este proceso y en su materia?
Definitivamente el no poder tener contacto físicamente con mis estudiantes porque estoy acostumbrada a ese cariño directo con ellos. Otra de las dificultades es lidiar y trabajar desde la distancia con los errores ortográficos, los copia y pega y sobre todo el internet que muchas veces nos dificulta la conectividad.
-¿Cree que a través de esta modalidad los estudiantes puedan mantener la calidad de educación?
La calidad de educación ha disminuido notablemente a raíz de las clases online; los estudiantes se aprenden de memoria los contenidos y luego se les olvidan, parte de ellos realizan las actividades para salir del paso y por eso luego vienen los problemas en las materias.
En la educación online está en juego el tiempo, las limitaciones, internet, acceso a aparatos tecnológicos, entre otros, realmente es muy complicado mantener una educación de calidad con tantos problemas en contra.
Por ser de esta forma, el aprendizaje es más lento, los profesores no logran abarcar la cantidad de contenidos que realmente les gustaría y deberían enseñar y, aunque demos todo nuestro potencial y nos esforcemos al máximo, hay situaciones que se escapan de nuestras manos.
-¿Considera que los contenidos dados han sido comprendidos por los estudiantes?
Considero que casi todos han sido comprendidos por la manera en la que se han dado. Los demás profesores de las demás materias y yo hemos buscado la forma de que este proceso sea agradable tanto para los alumnos, como para nosotros.
Evidentemente están sus excepciones de algunos estudiantes que se niegan a afrontar estos retos y simplemente no buscan maneras de aprender en medio de las adversidades.
-¿Para usted el hecho de revisar a través de esta modalidad y llevar las evaluaciones al día, ha sido complicado?
Sí, ha sido un poco más complicado porque considero que a través de dispositivos tecnológicos es más engorroso. Para mí no hay nada más fácil que tener las actividades en físico; por medio de una computadora es más trabajoso para nosotros los profesores de mayor trayectoria, puesto que no conocemos bien el manejo de estos artefactos.
-¿Cuáles son para usted las ventajas y desventajas de la educación online?
De las ventajas podemos sacar que hemos aprendido muchísimo en el mundo tecnológico. Para nosotros los profesores aún queda un mar muy profundo, en el cual seguiremos aprendiendo; igualmente los alumnos, conocerán más el uso correcto de estos dispositivos.
Pero ciertamente contiene muchísimas desventajas. A través de la tecnología se han formado alumnos más flojos, y se nota muchísimo a la hora de analizar, reflexionar, leer, hacer escritos de opinión. Pareciera que ellos dependen por completo de la tecnología para poder crear, y eso es algo muy grave.
Es importante enfocarnos en las fortalezas en medio de procesos como estos, debemos dejar a un lado las debilidades para poder seguir avanzando y a su vez aprender de ellas y así acercarnos a nuestras metas. Por más difícil que parezcan ciertas situaciones, siempre hay algún provecho que sacar, y es necesario identificarlo.
*Katherine González es estudiante de la Universidad Monteávila
*Fotografía: Cortesía
