Fotografías: Miguel González.-
A lo largo del mes de octubre se celebró el 20 aniversario de la Universidad Monteávila. El 2 de octubre de 1998 se aprobó en gaceta oficial el decreto fundador de esta casa de estudio, ubicada a los pies del majestuoso ívila.
En estos 20 años la comunidad umaísta ha hecho suyo los espacios de una pequeña casa que encierra grandes objetivos. Con altas y bajas, en medio de una crisis que pareciera no dar tregua, se sigue con tesón las enseñanzas de los maestros fundadores, educar para el bien y por el bien de una sociedad.
“Tenemos que ir hacia lo que quisieron los fundadores con un sentido siempre de renovación, modernidad y revisión; hacia el amor, la sabiduría, el sentido de transcendencia, la formación en competencias rigurosas para la vida profesional, el saber vivir en libertad. Hacia allí tiene que ir la universidad en un marco de crisis muy complejo, esto hay que pensarlo, creérselo, trabajarlo”, afirmó el rector Francisco Febres-Cordero, recientemente en una entrevista para Pluma.Â
Palabras que recogen el sentir de profesores y personal administrativo de esta casa de estudio. Es necesario insistir, recalcar la importancia de la excelencia y de la vida llena en valores.  “Tú la ves por fuera y parece chiquita, por dentro es más grande”, afirmó el profesor Gabriel Gutiérrez fundador de la UMA.
Para Gutiérrez uno de los principales logros de esta universidad es haber conseguido parcialmente, lo que se proponía. «Aquí las personas han salido un poco más doctas, un poco más cultas y con un visión más completa de cuál es la visión cristiana de la vida”.
Por tal motivo, celebra un nuevo aniversario y recuerda que la Monteávila va a su propio ritmo, con la intención de marcar paso firme.  “20 años no es nada para una institución que está llamada a funcionar por siglos”, indicó en una reciente entrevista.
En este sentido, Alicia ílamo, decana fundadora, recordó en este especial que se publicó desde Pluma, a lo largo de todo el mes que si bien es cierto «fue una hazaña fundar y sacar adelante una universidad en la era más nefasta de nuestra historia: sin dinero, sin apoyo gubernamental,  nunca faltó -ni falta- la luz de la fe y de la esperanza.  Así salió adelante durante estos 20 años la Universidad Montéavila y así seguirá avanzando para vencer todas las sombras que aún se ciernen sobre nuestra patria».
*Miguel González es estudiante de la Universidad Monteávila
