Sabrina Machado.-
Pasaron dos años para que las autoridades del Consejo Nacional de Universidades autorizaran la actualización curricular presentada por la Universidad Monteávila, con el propósito de ofrecer una propuesta más enriquecedora y atractiva, acorde con las exigencias de la sociedad actual.
Esta semana se conoció la noticia que viene a constituir un logro significativo para esta universidad, que tiene como objetivo fundamental otorgar una educación de calidad, personalizada y acorde con los requerimientos nacionales e internacionales, en procura de constituirse en un pilar de la comunidad.
En este sentido, la actualización curricular conlleva a cambios en el esquema académico planteado hasta la actualidad. A partir del próximo período –que comienza en el mes de septiembre- los cursos serán semestrales y no anuales en las carreras que se dictan en esta universidad: Ciencias Administrativas, Comunicación Social, Educación y Derecho.
Asimismo, este proceso que se inició hace al menos siete años con la revisión exhaustiva de los pénsums académicos y de los métodos de enseñanza adelantados en países europeos e incluso americanos implica también la esquematización de las carreras a cuatro años de estudios, a diferencia de los cinco planteados hasta la actualidad. Derecho será la única que mantendrá su récord.
La semestralización y el nuevo esquema académico tienen como propósito ofrecer a los jóvenes ofertas atractivas y de calidad, que redunden en el bien de la sociedad, así como estimular la madurez del estudiante de la Universidad Monteávila, que asuma su compromiso educativo en un período más corto de tiempo.
Así lo señaló el profesor Edison Mariño, director del Consejo de Desarrollo Científico, Humanístico y Tecnológico de la Universidad Monteávila, quien aseguró que con la actualización ganará el estudiante tanto en crecimiento, en formación como en conocimiento.
Mariño explicó que los cambios solo serán aplicados para los nuevos ingresos. Los alumnos regulares continuarán con el esquema previsto hasta la semana pasada, por lo cual la universidad comenzará en septiembre una dualidad a nivel de estructura que se mantendrá por cuatro años. En el 2023 está previsto que esta casa de enseñanza gradúe a dos promociones simultáneamente: la última con el esquema de estudios anterior y la primera con el nuevo registro curricular.
.- ¿Cómo favorece la semestralización al estudiante?
La Universidad Monteávila se mantuvo con el sistema anual por el tipo de universidad que somos, una universidad que brinda una educación integral y personalizada. Cuando tratas a un estudiante por un año logras más cercanía que cuando lo haces por semestre, pero la desventaja de la anualización es que tienes mucho tiempo entre el momento que comienza y que termina el curso. Mucho tiempo para validar cómo va tu formación, cuando te das cuenta que no rendiste como debías rendir ya es demasiado tarde. Con la semestralización este proceso es más dinámico.
.- ¿Se busca a un estudiante más proactivo?
Mucho más proactivo. Con la semestralización hay más dinamismo, más posibilidades que las personas engranen mejor dentro de la parte académica netamente. Una de las grandes ventajas es que hace que el estudio sea más intenso y el estudiante debe asumir el ser estudiante universitario de una manera más profunda.
Para la universidad es bueno porque, de una manera u otra, hace que el alumno esté mucho más pendiente de su ritmo académico y los programas se hacen más flexibles. Además se continuará con las mismas normas del reglamento de la universidad en cuanto a materias aplazadas y aprobadas.
.- ¿La reducción de un año académico en tres de las cuatro carreras no afecta la preparación del estudiante?
El problema básico está en la formación de la educación media, cada año vemos cómo llegan menos preparados al ciclo universitario. Por eso, este año tendremos un curso de iniciación, que comenzará el 17 de septiembre. Tres semanas comunes donde se aplicará metodología de estudios para reforzar conceptos de interpretación, pensamiento abstracto, entre otras áreas. Â El estudiante deberá generar mayor compromiso en su formación académica.
.- ¿Cómo se implementará esta nueva dinámica en la universidad?
Vamos a comenzar en septiembre con el primer semestre, los que pasaron de segundo hasta quinto año siguen con el régimen anual, para ellos no va a haber cambios, por lo cual implementaremos dos sistemas paralelos, tanto académico como administrativo.
El proceso para los profesores será también más dinámico, serán 16 semanas en clases más dos semanas de exámenes finales y reparación. Luego habrá un período de dos semanas entre semestre y semestre y el año académico terminará en julio.
.- ¿Qué ventajas le otorga este cambio a la universidad en relación con otras universidades?
Nos hace más competitivos, se graduarán más rápido. En esta actualización hemos cuidado que los aspectos fundamentales de las carreras queden intactos. No vamos a sacrificar contenido por el hecho de llevar las carreras a cuatro años y hemos procurado que los planos de conocimiento estén presentes en los nuevos pénsums.
.- ¿Cómo se cuidará la atención personalizada que brinda la universidad?
Siempre buscaremos que haya una relación alumno profesor, nos las ingeniaremos para que exista en menor tiempo esa conexión. Ahora celebramos este cambio académico que logra la universidad, que apunta a la madurez del estudiante que se verá reflejada en beneficio de la propia universidad. Queremos que nuestros estudiantes salgan mejor preparados para un país que se lo exige.
*Sabrina Machado es coordinadora de Pluma
