En línea con nuestra aspiración de contribuir en la formación de profesionales en la gestión de compliance, la privacidad y la transparencia, llevamos a cabo el Venezuela Compliance Forum 2024 en colaboración con la World Compliance Association (WCA).
El foro tuvo por tema central las “Tendencias globales y desafíos locales en el cumplimiento normativo”, y contó con las participaciones del rector de la Universidad Monteávila, Guillermo Fariñas Contreras; la presidenta de la World Compliance Association, Alba Lema; el director general de la World Compliance Association, Néstor Aparicio; Lisandro Bautista, socio de B&P Abogados y miembro del Comité Venezuela de la WCA; Jesús Villegas, socio de Baker & McKenzie y miembro del Comité Venezuela de la WCA; y Diego Castagnino, profesor del Programa de Estudios Avanzados en Arbitraje (PREAA) de la Universidad Monteávila.
A lo largo del evento los asistentes pudieron conocer también sobre las iniciativas y actividades que desarrolla la asociación a nivel mundial, así como lo que se puede esperar a desarrollar en Venezuela.
“La universidad, comprometida con la responsabilidad social y con la ética, reconocemos la importancia fundamental que tiene el cumplimiento normativo para el éxito de las organizaciones y el bienestar de la sociedad en su conjunto”, afirmó Fariñas Contreras.
El rector de la Monteávila también resaltó la importancia de la confianza y la cultura organizacional para la aplicación del compliance con la finalidad de estimar el valor de las buenas prácticas de una organización.
“Cumplimiento normativo se refiere a actuar con rectitud e integridad. Esto se demuestra con evidencias y no con discursos”, dijo. “El cumplimiento no es un documento, constituye una estrategia que consolida la trayectoria de la organización”, continuó.
Mientras, Lema señaló que además de proteger a la empresa y generar confianza para ellas y los gobiernos, el mayor beneficio que ofrece el compliance es que promueve la cultura ética corporativa.
La presidenta de la WCA animó a los asistentes a creer en la posibilidad del desarrollo de esa cultura, a pesar de que requiere tiempo. “Creamos en el cumplimiento como algo bueno, beneficioso”, instó.
En su intervención, Bautista destacó el rol de la universidad dentro del área del compliance, describiéndola como el “espacio de formación de líderes íntegros”. Para el abogado, una de las necesidades en materia de cumplimiento normativo es también el cyber compliance, ya que contribuye con la supervivencia empresarial en el mundo digital.
Por su parte, Castagnino dio luces de por qué estudiar el compliance dentro del país: el tema prepara a los profesionales para enfrentar los desafíos de la actualidad, a la vez que permite capacitarlos para anticipar el futuro. Sin embargo, de acuerdo con el experto, la contribución más relevante del cumplimiento normativo es a la generación de confianza y a la reputación general de la empresa.
Aparicio habló sobre la ética organizacional, comentando que esta consiste en que la empresa cumpla con sus obligaciones. “La ética marca un estándar de calidad”, apuntó el director de la WCA.
El ponente detalló que las organizaciones quieren lograr seguridad jurídica y eliminar la incertidumbre, y dijo que los compliance officers son responsables de gestionar el riesgo. “Hemos pasado de ver al riesgo como algo malo a verlo como una oportunidad”, afirmó Aparicio.
Según el director, la satisfacción de las necesidades de las partes interesadas es parte del propósito del compliance. Aconsejó que una buena preparación en el tema también resultará en una mejoría de la empresa.
Finalmente, Villegas respondió a la interrogante de cuál es el rol del abogado corporativo actual. Según el profesor especialista en el área, dicho papel se resume en el “ser guardianes de sus negocios y clientes”.
Para Villegas, el propósito del cumplimiento normativo es el entendimiento del cambio como motor corporativo. Añadió que se trata de un problema esencialmente cultural, y que una de sus ventajas es que puede ser aprendido.