Las universidades son comunidades de personas -maestros y estudiantes- y saberes. No somos simplemente una organización que otorga un servicio a unos usuarios. Es decir, todos somos miembros de la misma institución. Cada uno con sus roles, responsabilidades y prerrogativas.
En la gran mayoría de las casas de estudio superior, salvo contadas excepciones, los estudiantes son muy numerosos. Esto exige que haya medios y modos que permitan canalizar sus intereses y promuevan sus iniciativas. Aquí entra la representación estudiantil, la cual es un valor de las universidades desde hace muchos años. Los centros de estudiantes son un modo muy importante de encarnar esta representación. Son los mismos estudiantes quienes eligen a sus representantes.
Las elecciones suelen ser una manifestación de democracia, de iniciativa y, todo hay que decirlo, también de jolgorio. Los candidatos tratan de entender a su electorado y ofrecerles la mejor oferta de acciones y actividades para el siguiente período. Las votaciones suelen ser muy concurridas. Y la proclamación muy bien acogida. Por supuesto, hay manifestaciones a veces exageradas tanto de los electos como de los que no fueron favorecidos por el voto mayoritario. Se entienden, por las emociones involucradas.
Pero luego toca el momento de ser maduros y seguir adelante. Los favorecidos, con gestos de unidad y acogida hacia los otros. Los no favorecidos, al saber aceptar el resultado, y hasta ofrecer su colaboración por el bien de todos. Adrede evito hablar de ganadores y perdedores. Porque todos ganamos. Primero, la universidad, por contar con esa representación de quienes son la razón de su existencia: sus estudiantes. Luego los estudiantes, que se hacen oír. Los electos, porque necesariamente han de crecer como personas por las responsabilidades asumidas. Y los no favorecidos, porque pueden aprender sobre qué han podido hacer distinto o mejor para haber triunfado.
Para el CEUMA del curso 2024-2025, ha ganado la plancha Umanízate. Mis felicitaciones al grupo que encabeza Daniel Romero. Me gusta el nombre, porque incluye las siglas con las que nuestros estudiantes se identifican. Y hace alusión a la formación humanística, una de las notas distintivas de la Monteávila.
Les corresponde un período de muchos retos: actividades en dos localidades. Seguimos en nuestras queridas instalaciones en Boleíta. Y se abre un futuro promisorio con el edificio en Lomas del Sol. Deberán ser imaginativos y proactivos para oír a los de aquí y a los de allá. Y para tener iniciativas que sean para el bien de todos.
Como siempre, cuenten con el apoyo de las autoridades para la buena marcha del CEUMA.
-Guillermo Fariñas Contreras, rector
Daniel Romero, Sofía Delgado y Eduardo Arango serán, respectivamente, los próximos presidente, vicepresidente y secretario general del centro de estudiantes; mientras que Laura Di Cocco, Samantha Arana, Diego Rojas y Andrea Adrián serán los representantes de las facultades de Ciencias de la Comunicación e Información, Ciencias Económicas y Administrativas, Ciencias Jurídicas y Políticas, y Ciencias de la Educación.
“(Queremos) procurar que el alumnado tenga proactividad, que se vea relacionado y principalmente se vea acoplado por el centro de estudiantes. Nosotros no estamos formando nada más personas, estamos formando a profesionales. Por eso es que nosotros creemos que es una convicción principal también que estos cambios, que estos procesos sean los primeros y principales a futuro”, dijo Daniel Romero, nuevo presidente electo de la plancha Umanízate.
